En esta microaventura caminaremos por la historia de Santa Cruz de Tenerife. Saliendo desde los límites de la ciudad, haremos un recorrido a pie para explorar la presa de Tahodio y pasar un agradable rato alrededor de su famosa charca, rodeados de barrancos y naturaleza.
- Dónde: Santa Cruz de Tenerife.
- Duración: 3 horas (ida y vuelta).
- Dificultad: Fácil. El camino transcurre por una pendiente muy suave con algún repecho puntual.
- Imprescindible: Protección solar y gorra o sombrero, agua y algo de comida. Descargar el track Descargar artículo en PDF
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Nos proponemos remontar el barranco de Tahodio, casi desde su desembocadura en el Barrio de La Alegría de la ciudad de Santa Cruz de Tenerife, durante unos cinco kilómetros hasta llegar a nuestro objetivo. La presa de Tahodio se encuentra aproximadamente en el punto intermedio del barranco de Tahodio, que desciende desde los montes de Anaga y da nombre a la propia presa, su charca y la pequeña población de casas y huertas que se dispersan aguas abajo hasta llegar a la ciudad.
El camino hacia la presa de Tahodio, un recorrido por la historia
Terminada de construir en el año 1926, la misión de la presa de Tahodio fue recoger y almacenar el agua de lluvia que desciende por el barranco para servir de riego a la agricultura de la ciudad, que antiguamente se encontraba rodeada por grandes fincas de plataneras, además de servir de abastecimiento para la población a través de antiguas fuentes públicas. Y así cumplió su función durante décadas (al contrario que la mal lograda presa de Los Campitos) y continúa sirviendo de regadío para unas pocas huertas que sobreviven en la zona.
La mayor parte del camino hasta la presa de Tahodio transcurre por carretera y nos permite conocer la historia del lugar a través de las ruinas de la antigua infraestructura hidrológica que conectaba el barranco: antiguos canales, acueductos, puentes y güinches (algunos todavía en activo) que relatan la intensa actividad agrícola en la que se que basó la vida de las generaciones anteriores.
También nos encontramos con otro tipo de ruinas, por desgracia de la generación actual, como chatarra, coches semi-desguazados y escombros visibles por el camino, así como de igual manera se encuentra la presa de Tahodio, donde se prohibe el acceso ante el peligro de caída. La renovación y el buen mantenimiento de la presa haría de este lugar un espacio único para el disfrute de todos, pero nos conformaremos con imaginar un paseo por la formidable pasarela de hormigón que recorre la presa y unas hipotéticas vistas que se sugieren espectaculares.
A partir de aquí disfrutaremos de otro paseo, no menos espectacular, por el sendero que bordea la charca hasta el extremo contrario, donde podremos disfrutar de la flora y la fauna que se ha establecido alrededor del agua. La zona está poblada por cardones, palmerales, patos, reptiles e incluso tortugas que nos acompañan entre las altas paredes del barranco de Tahodio y las impresionantes vistas que nos rodean.
Es posible llegar a pie hasta los montes de Anaga por el mismo sendero, que finaliza en el Pico del Inglés. En nuestro caso nos quedaremos contemplando la charca mientras reponemos fuerzas para el camino de vuelta y dejaremos esa subida para otra microaventura.
La microaventura en vídeo
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El concepto de microaventura está conectado con salir de casa y descubrir, disfrutar de la naturaleza y de la historia de cada lugar. En el caso de Santa Cruz de Tenerife, la decepción del joven Charles Darwin que no pudo desembarcar en la isla, un recorrido por la ciudad entre torres y castillos o el misterioso búnker de San Andrés entre otras de nuestras publicaciones recomendadas.
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