El Arco de las Peñitas es uno de los lugares más bonitos de la isla de Fuerteventura. Sus formas caprichosas y el singular entorno en el que se encuentra hacen que este enclave sea de visita obligada.
- Dónde: Pájara.
- Duración: Subir y bajar puede llevarte en torno a 1 hora.
- Dificultad: Media. La distancia es poca, pero llegar hasta el arco requiere salvar cierto desnivel. No hay un camino claro y en ocasiones hay que trepar. Descargar artículo en PDF
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Enredos de roca
Te hemos hablado recientemente del Barranco de las Peñitas, una pequeña ruta de senderismo en pleno Parque Rural de Betancuria que nos llevó a descubrir una de las pocas presas de la isla. Un inesperado entorno húmedo en un entorno eminentemente desértico, que da lugar a un singular paisaje de contrastes.
En una zona muy próxima, tomando el desvío adecuado, es posible llegar hasta el Arco de Las Peñitas, el motivo de nuestra microAventura de hoy.
El Arco de las Peñitas da la impresión de haber sido creado por las manos de un gigante, que retorciera la roca hasta darle su forma actual. Sus sinuosas curvas hipnotizan al visitante, y tienen la propiedad de detener el paso del tiempo. Te aseguramos que una vez llegues allí, pasarás largo rato admirándolo casi desde cualquier ángulo posible.
La experiencia de llegar hasta él también es un buen recuerdo. Como te contaremos a continuación, no existe un sendero marcado, y alcanzar el arco implica subir casi campo a través por una “escalera” natural formada por grandes rocas desprendidas desde lo alto.
Cómo llegar al Arco de las Peñitas
La forma más sencilla de llegar al Arco de Las Peñitas es hacerlo a través del conocido como “Camino de Buen Paso” (FV-627), al que se accede desde la carretera que une Pájara con el poblado costero de Ajuy. Al final de la carretera existe un amplio descampado en el que es posible aparcar.
A partir de ahí toca echarse a caminar. El inicio del sendero hacia el barranco, al norte del aparcamiento, está claramente marcado. Este camino lleva al cauce del barranco, el palmeral y la ermita y no al arco en sí. Este último está en lo alto del otro barranco que asciende hacia el norte, el Barranco del Rodeo. Es por ello que en cierto punto debes tomar un desvío a la izquierda.
A partir de aquí no existe sendero. Se intuyen algunas alternativas para ascender, pero no se identifica un camino claro, y por momentos todo atisbo de senda desaparece por completo. En cualquier caso, llegar al arco no es complicado. Basta con saber dónde se encuentra y hacer camino al andar, eso sí, con la precaución que requiere el tener que transitar por una zona rocosa de elevada pendiente, que en ocasiones exige trepar.
Ten en cuenta que el Arco de las Peñitas no se ve hasta que prácticamente has llegado hasta él. Te dejamos la localización exacta en el mapa.
Tanto para subir al arco como para hacer senderismo en la zona debes tener en cuenta que estás en un lugar árido, lejos de multitudes. Es imprescindible llevar agua y protección solar, además de calzado adecuado. Si tu intención es ir solo, no olvides dejar dicho a alguien a donde pretendes ir. Es un acto sencillo y puede ser de mucha ayuda si tienes algún percance.
Sobre la conservación del entorno
El Arco de las Peñitas es uno de los lugares favoritos de aquellos ávidos de contenido para sus redes sociales. El lugar sin duda lo merece, pero también merece respeto. Es habitual que los visitantes se encaramen al arco, para sacarse la instantánea que creen más impactante. Esto es totalmente innecesario y puede terminar acabando con este enclave para siempre. Existen infinitas posibilidades fotográficas para autoretratarse en el Arco de las Peñitas, sin necesidad de encaramarse en su frágil estructura. Ya sabes, si al llegar allí tienes la tentación de trepar, recuerda estas palabras ;).
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