El paseo litoral de El Sauzal es un camino que recorre la línea de costa de este municipio de la isla de Tenerife. Pese a estar prácticamente escondido a la simple vista humana y la complejidad para llegar hasta él, se trata de una zona perfectamente acondicionada para caminar, hacer un picnic o darse un baño, si el tiempo y el mar lo permiten, entre otras actividades.
- Duración: Puedes recorrer todo el paseo litoral de El Sauzal en menos de una hora, pero dependiendo de tu forma de acceso y tiempo que dediques en el lugar y a la fotografía, puedes pasar hasta el día entero.
- Dificultad: Media. Aunque el lugar en sí transcurre por un espacio acondicionado, tanto llegar hasta aquí como las precauciones que debes guardar en todo momento exigen elevar la dificultad.
- Imprescindible: Protección solar en verano y algo de abrigo en invierno. Siempre te vendrá bien sea un chubasquero por el oleaje y el viento, así como algo de comer y beber. Descargar artículo en PDF
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Cómo llegar
Puedes acceder al paseo litoral de El Sauzal de dos maneras, ambas con una complejidad que convierten esta misión en otra micro aventura más.
Caminando
A través del sendero que parte desde el mirador de Las Breñas, homenaje a los pescadores que rescataron a los supervivientes del accidente aéreo de septiembre de 1966, en el que un avión DC-3 amerizó en esta costa poco después de despegar en el aeropuerto de Tenerife Norte.
Esta forma de acceder es recomendable si te gusta caminar y estás en buena forma física, ya que el desnivel es muy pronunciado, siendo la ida en bajada, pero tendrás que remontar la subida de regreso.
Sin embargo, aunque no te decidas por esta opción, te recomendamos visitar el mirador antes o después de tu micro aventura por el camino litoral, ya que ofrece una de las vistas de la costa de El Sauzal y de El Teide.
En coche
El acceso en coche también tiene su complejidad. Encontrar el desvío hacia el camino Rojas, carretera que nos conduce hasta el paseo litoral de El Sauzal, requiere algo de atención, cuyo acceso está situado en el cruce con la calle de Las Breñas, número 76.
Por otro lado, conducir por ella requiere de todos tus sentidos. Se trata de una carretera estrecha de doble sentido, muchas curvas y pocas zonas para ceder el paso, por lo que tendrás que extremar la precaución y entenderte con los conductores que circulan en sentido contrario, especialmente en invierno. Además, esta carretera tiene un horario de apertura que varía tanto en verano como en invierno. En este enlace de la página web del Ayuntamiento de El Sauzal tienes toda la información actualizada: más información.
Al final de la carretera encontrarás un pequeño aparcamiento y habrás llegado al paseo litoral de El Sauzal. Después de esta micro aventura para llegar hasta aquí comienza la verdadera micro aventura 🙂
El paseo litoral de El Sauzal: lugar de contrastes
Este camino goza de estas excelentes condiciones después de un ambicioso proyecto de recuperación ambiental, eliminando todas las construcciones que en su día ocuparon la línea de costa para devolver el paisaje de todos a la naturaleza y a la sociedad.
Por supuesto, el objetivo de nuestra visita es la fotografía. Nos encontraremos con altos acantilados y un mar azul y bravo que rompe contra enormes rocas volcánicas, que generan tantos contrastes como imágenes se nos pueden ocurrir.
Además de recorrer la línea de costa, este paseo accede a una pequeña península de roca volcánica, atraviesa antiguas construcciones de cultivo y cuevas que sirvieron de refugio para los agricultores y pescadores de la zona, además de contar con bifurcaciones que llegan al mar en forma de terrazas para darse un baño o tomar el sol.
La seguridad es lo primero: ojo con el mar
Los que somos isleños lo sabemos antes de empezar a caminar. Nunca se debe perder la atención sobre el mar, especialmente en zonas como esta. Transitar por las orillas de roca implica estar siempre pendiente de las olas, puesto que puede alcanzarnos la subida de la marea si nos despistamos del tiempo o inesperadamente puede venir una ola de mayor intensidad en cualquier momento.
Leer también en Lainakai: Las Mareas.
Pero sobre todo, si quieres darte un baño, asegúrate de que el mar en esta zona está en calma y hay más personas en el agua. Nunca te metas en el mar en este tipo de lugares si ves oleaje y no hay nadie más haciéndolo (si los lugareños no están disfrutando del mar, una de las cosas que más les gusta, es porque no es seguro) o por supuesto, ni se te ocurra bajo ningún concepto cuando no haya nadie más en el lugar.
Opciones infinitas para fotografiar
Con todos los ingredientes y características de este camino excepcional, notarás que las opciones de fotografía son infinitas. El lugar es tranquilo, sin masificar y sin ruidos.
El viento, el mar, los acantilados, las rocas y los caminos se ofrecen para inventar cualquier composición, planificar largas exposiciones, tomas panorámicas o centrarnos en los detalles que nos rodean por todas partes.
Te dejamos con algunas de las tomas capturadas por el Equipo Lainakai a lo largo de diferentes visitas.
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