Es frecuente que, en el transcurso de nuestras microAventuras, imaginemos cómo debían contemplar nuestro entorno natural los antiguos habitantes de esta tierra canaria. Hoy saciamos parte de esta curiosidad visitando los Letreros de Balos. Uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de la isla de Gran Canaria.
- Dónde: Agüimes, Gran Canaria.
- Duración: Te llevará apenas 30 minutos en coche desde la capital de la isla.
- Dificultad: Baja. Es posible llegar en coche hasta los pies del yacimiento.
- Imprescindible: Agua, en especial si piensas caminar algo por la zona una vez visto el yacimiento. Descargar artículo en PDF
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Visitando un yacimiento arqueológico
Los Letreros de Balos es el nombre que recibe un yacimiento arqueológico localizado entre los municipios de Agüimes y Santa Lucía, en la isla de Gran Canaria. El lugar es conocido por albergar una rica colección de representaciones de arte rupestre: grabados tallados en la roca por los antiguos habitantes de la isla. De hecho, está considerado como el más importante de los conjuntos de grabados existentes en ella.
Se trata de representaciones en piedra conocidas como petroglifos, repartidas a lo largo de un macizo de roca basáltica que sobresale en medio del cauce del barranco de Balos. Esta suerte de “cresta de roca” es tan llamativa que no nos extraña que los aborígenes lo consideraran un lugar privilegiado al que acudir. En ella plasmaron, mediante técnicas de picado y rayado, dibujos de todo tipo. Desde representaciones humanas y animales hasta lo que parecen ser primitivas formas de escritura.
El lugar está convenientemente protegido por una valla que rodea todo el perímetro. Protección que a todas luces ha llegado tarde, pues lamentablemente este se encuentra muy deteriorado por el inadmisible comportamiento de visitantes pasados. Aun así, es todavía posible discernir algunos de los grabados originales.
El descubrimiento de tales representaciones de arte rupestre nos trae a la imaginación escenas de tiempos pretéritos, y nos lleva a preguntarnos cuál sería el sentido último de las mismas ¿Rituales religiosos? ¿Simple expresión artística? Quién sabe…
Tras pasar largo rato bordeando el perímetro (al parecer se puede acceder al interior previa solicitud al Cabildo de Gran Canaria), comenzamos a reparar en el entorno. Descubrimos entonces que la estructura basáltica que alberga el yacimiento parece extenderse hacia el interior de la isla. ¿Habrá más grabados escondidos en esa zona quizás no tan explorada? Por un momento levantamos la vista y nos topamos súbitamente con la presencia inesperada del Roque Aguayro ¡Una montaña! ¿la subimos? Si nos lees con frecuencia sabrás que una microAventura lleva inevitablemente a otra, y aquí nos han surgido dos nuevos retos en un instante…
Deambulamos un rato por la llanura observando curiosos el suelo, tratando de encontrar restos de algún gánigo, o alguna cuenta de collar. Finalmente, tras un agradable paseo en la soledad de este barranco, y después de curiosear un solitario cráneo de cabra, iniciamos el camino de regreso. Eso sí, nos volvemos a casa con la sensación de haber hecho un pequeño viaje al pasado, y con ganas de saber más sobre cómo vivían los antiguos habitantes de nuestras islas.
Modo de llegar
El yacimiento de los Letreros de Balos se encuentra en el barranco del mismo nombre, en el municipio grancanario de Agüimes. Te dejamos la localización exacta en el mapa. El acceso al lugar está en la carretera GC-104, que enlaza el Cruce de Arinaga con el casco de Agüimes, aproximadamente a unos 4 km desde el cruce. El desvío que debes tomar es una pista de tierra que sale de la carretera a mano izquierda, justo a la altura de un gran embalse visible en el margen derecho de la calzada. Hay un pequeño poste que lo señaliza.
A partir de ahí tienes dos opciones: aparcar y hacer el trayecto caminando o aventurarte con el coche hasta los pies del yacimiento. La pista no está en muy buen estado pero yendo despacio es asequible para casi cualquier vehículo. Además, el paisaje a lo largo del trayecto, salpicado de construcciones abandonadas, no es especialmente bonito, por lo que puedes ahorrarte la caminata a pie.
Pasada una granja de cabras, que bordearás por su cara sur, deberás tomar la segunda salida a la derecha. Una pista que se adentra hacia el interior por el cauce mismo del barranco. Unos pocos minutos después llegarás a tu destino.
Deterioro del lugar
Como en tantas otras ocasiones, no podemos dejar de denunciar aquí aquello que creemos que lo merece. En este caso el deplorable estado del yacimiento en sí, al que las medidas de protección han llegado realmente tarde. Son incontables los grabados hechos por desalmados visitantes que han deteriorado significativamente el yacimiento, no sólo inscribiendo absurdos legados de «nombre y fecha», sino llegando a reproducir grabados originales, que hacen al visitante dudar sobre la originalidad de los mismos.
Se aprecia incluso un cierto estado de abandono de las propias instalaciones. Pues la valla se encuentra rota en algún lugar y los letreros informativos están deteriorados.
Esperamos que este cierto sabor agridulce que se lleva el visitante sirva al menos para concienciar sobre el respeto que merecen lugares como este, tanto aquí en las islas como en tierras más lejanas.
Begona
Quería agradecer la existencia de este blog, que me ha permitido llegar a encontrar los petroglifos de Balos. Os dejo aquí el artículo en el que cuento mi experiencia https://www.eldiario.es/canariasahora/canarias-opina/petroglifos-telaranas_1_10490648.html
Muchas gracias,
Pablo
Hola Begoña,
Muchas gracias por pasarte por aquí. Nos alegra haber podido ayudarte ☺️.
¡Buen artículo!
Saludos,
Pablo.
Begona
Muchas gracias, Pablo y equipo, seguid con artículos tan interesantes! Saludos, Begoña