El tajinaste rojo del Teide es una de las muchas especies endémicas de Canarias. Se trata de una planta única en el mundo, que solo podemos ver en el Parque Nacional del Teide y durante un corto período de tiempo, con un ciclo de floración bienal que se convierte en llamada y motivo perfecto para ir a las grandes montañas de Tenerife en su búsqueda.
- Dónde: Las Cañadas del Teide, Tenerife
- Duración: Variable.
- Dificultad: Fácil, salvo que decidas hacer todo el recorrido de Siete Cañadas o La Fortaleza (visita los enlaces a estas publicaciones para conocer más detalles).
- Imprescindible: El tajinaste rojo del Teide florece en primavera, por lo que el tiempo puede ser muy cambiante. Lleva algo de abrigo, protección solar y gorra o sombrero... agua y algo de comer si decides adentrarte en su búsqueda. Descargar artículo en PDF
(Exclusivo para suscriptores)
Nuestro protagonista florece durante unas pocas semanas cada dos primaveras. No siempre se deja encontrar con facilidad, pero en ocasiones lo hace con un estallido de ejemplares que llenan el paisaje con miles de figuras características por un color rojo muy intenso y una figura cónica que apunta al cielo, pudiendo alcanzar una altura de hasta tres metros.
Como te avanzábamos en la introducción, el tajinaste rojo del Teide es un endemismo de la isla de Tenerife, perteneciente al género Echium, concretamente con el nombre científico Echium wildpretti en homenaje a Hermann Wildpret por su trabajo en la catalogación y ampliación de la variedad de este género (Fuente: Canariwiki). Además, en Canarias existen otros tajinastes endémicos como el tajinaste rosado de La Palma (Echium wildpretii ss Trichosiiphon) o el tajinaste azul de Gran Canaria (Echium callithyrsum).
Dónde encontrar el tajinaste rojo del Teide
Pues como su propio nombre indica, puedes encontrarlo El Teide 🙂 En algunas floraciones resulta misión casi imposible, mientras que en años de auge de ejemplares resultará muy sencillo identificarlos y acercarse hasta ellos, siempre manteniendo una distancia de seguridad puesto que se trata de una especie extremadamente sensible.
El tajinaste rojo salpica toda la superficie del Parque Nacional del Teide, de ahí que también sea conocido como «sangre del Teide».
Podrás encontrarlo casualmente recorriendo la carretera de La Esperanza TF-24, desde la zona de Izaña hasta el Portillo y desde aquí por la carretera TF-21 pasando por Montaña Blanca hasta llegar al cruce de Boca Tauce… pero no hemos venido a mirar el paisaje por la ventanilla.
Puedes adentrarte a pie hacia el interior del parque nacional para ver algunos ejemplares de tajinaste más aislados y en solitario. Por ejemplo, si emprendes el camino hacia La Fortaleza o en las inmediaciones del mirador del Tabonal Negro, donde disfrutamos de una noche de astrofotografía que titulamos «Los tajinastes rojos apuntan al cielo».
Pero la verdadera aventura que te proponemos consiste en encontrar poblaciones de tajinaste rojo tan numerosas que llegan a formar un «bosque» propio.
El volcán Las Cañadas, hogar del tajinaste rojo
La erosión de las paredes interiores del antiguo volcán Las Cañadas, en su recorrido por todo el perímetro sur del Parque Nacional del Teide, ha formado suaves pendientes ascendentes hacia sus diferentes cimas. Es en estas elevaciones donde encontramos las mayores concentraciones de tajinaste rojo.
Todo este recorrido geológico por la cumbre sur de la isla de Tenerife es un auténtico reguero de poblaciones de tajinaste, que incluso llegan a sobrepasar los límites del parque nacional en su descenso hacia los altos de Arico, Granadilla y Vilaflor. Pero es en la protección de las paredes derruidas de este gran volcán donde, al parecer, el tajinaste rojo ha encontrado su lugar favorito para florecer cada dos años.
Siete Cañadas
Siete Cañadas es un sendero unos 16 kilómetros de distancia que une el Parador Nacional del Teide con el Centro de Visitantes del Portillo, recorriendo las diferentes cañadas que le dan nombre. Si iniciamos el sendero desde el propio parador, pronto comenzaremos a ver poblaciones de tajinaste rojo en las faldas de Montaña Guajara y conforme seguimos avanzando, tras rodear El Capricho estos grupos de tajinaste serán cada vez más numerosos.
Profundizando aún más hacia el interior de las Siete Cañadas (no te diremos hasta dónde para que tu aventura no termine) seguiremos encontrando enormes concentraciones de tajinaste rojo.
Llano de Ucanca
El llano de Ucanca es un enorme valle de gran extensión que rodea parte del edificio volcánico del Teide hasta llegar a su límite sur. Aquí, de nuevo las erosionadas paredes del cráter del gigantesco volcán las Cañadas vuelven a concentrar importantes agrupaciones de tajinaste rojo, visibles con comodidad desde la reconocible Zapatilla de la Reina.
Chavao
El sendero de Chavao continúa recorriendo el interior del cráter del volcán Las Cañadas en su parte sur, uniendo el conocido cruce de Boca Tauce y la casa de Juan Évora con el mirador de las Narices del Teide. Durante el trayecto atravesaremos varias cañadas y entre ellas, de nuevo en las elevaciones hacia las cumbres, nos encontraremos con poblaciones muy numerosas de tajinaste rojo que nos dejarán impresionados.
Un símbolo de identidad que debemos proteger
El tajinaste rojo es, sin ninguna duda, uno de los símbolos de identidad de Tenerife y de Canarias. Esta especie única en el mundo destaca por su belleza, por su intensidad y por su fuerza dominante en un paisaje agresivo de roca y condiciones extremas. Sin embargo, este habitante tan singular es al mismo tiempo muy sensible ante elementos que no son propios de su entorno natural.
Por ello, en tu visita a los tajinastes deberás mantener siempre una distancia, observarlos sin tocar (las abejas te lo recordarán en todo momento porque su flor produce una miel exquisita) y, sobre todo, no dejar ningún tipo de rastro de tu paso por el lugar para mantener este equilibrio tan delicado.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.